De la plaza del Teatro Federico García Lorca a la calle Madrid con parada en Plaza General Palacio.

“Siempre los soñadores han estado cerca del vuelo, transformando sus ideales en rampas de lanzamiento hacia universos inesperados. Y así, contra vientos que soplan en contra, el permanente sueño de la humanidad, al vuelo. Desde Ícaro hasta las más impresionantes odiseas de la navegación espacial, encontrando espacios de vuelo que nos permitan surcar otros espacios con los que se conformarán el nuevo rumbo con el que descubrir inmensidades, que son nuestros anhelos de volar. Calles, plazas y espacios no convencionales se convierten en el marco de estos encuentros para convertirlos en almas viajeras y sus plasticidades.

Y a volar que son dos días”